¿Cuándo se acabará el petróleo?
Debate sobre si nos sobra el oro negro
Debate sobre si nos sobra el oro negro
| | AFP La producción de 2005 es cinco veces superior a la de 1950, según las previsiones de la Agencia de Información Energética. |
José Ramón Aramendi, EFE
"Antes de 1992 el petróleo se habrá agotado", así lo anunció Donella H. Meadows en 1972 en su conocido y célebre libro, "Los límites del crecimiento". Este pensamiento no es nuevo. El profesor Simon nos recuerda que en 1914, la oficina de Minas de Estados Unidos calculaba unas reservas para una década. En 1939, el Departamento de Interior de Estados Unidos pronosticó que el petróleo se agotaría en 13 años. Pero ahora las reservas siguen creciendo.
Preocupa el futuro del crudo
El pesimismo de las décadas de los 70 y los 80 nos ha hecho pensar que nuestra forma de producción y de vida se iba a quedar sin el preciado y necesario oro negro.
Como afirma irónicamente el catedrático danés Bjorn Lomborg: "Muy pronto nos quedaremos sin petróleo. Una vez más".
Ciertamente, el petróleo es un recurso natural limitado y por tanto agotable. Además, su producción y consumo se están multiplicando exponencialmente.
La producción de 2005 es cinco veces superior a la de 1950, según las previsiones de la Agencia de Información Energética de Estados Unidos.
La producción de 2005 es cinco veces superior a la de 1950, según las previsiones de la Agencia de Información Energética de Estados Unidos.
- El petróleo se ha conocido desde tiempos inmemoriales. Los pueblos precolombinos ya lo conocían.
- Su aplicación más importante hasta mediados del siglo XIX consistió en su utilización en forma de alquitrán, destinado principalmente a la impermeabilización de barcos.
- La demanda de petróleo comienza a desarrollarse a mediados del siglo XIX con el auge de la segunda Revolución Industrial.
- Hasta ese momento se venían utilizando aceites vegetales y sobre todo aceite de ballena.
- En 1859 Edwin Drake perforó el primer pozo de petróleo, cerca de Titusville, en Pensilvania. Fecha considerada desde entonces como la del "descubrimiento" del petróleo.
- Su producción cobra un gran impulso a partir de la primera década del siglo XX. La dependencia del petróleo se hace imprescindible a partir de la Segunda Guerra Mundial.
- En la actualidad es el producto más importante y valioso del comercio internacional, supone cerca del 2 por ciento del PIB mundial, según la Agencia Internacional de la Energía.
- Los datos oficiales hechos públicos por Estados Unidos a finales de febrero último indicaban que las reservas de crudo había aumentado un 9.9 por ciento respecto a la misma fecha del año anterior.
- Traducido en barriles, las reservas alcanzaron 326.7 millones de barriles, y también crecieron los reservas estratégicas, hasta los 684.3 millones de barriles.
- En total, las existencias de crudo y productos refinados en Estados Unidos incluida la Reserva Estratégica, alcanzaba los 1,711.5 millones de barriles.
- En China, segundo consumidor mundial de crudo después de Estados Unidos, los expertos calculan que solo se están usando un 40 por ciento de las reservas que realmente posee el gigante asiático.
¿Por qué nos sobra el crudo?
¿Cómo puede ser que cada vez consumamos más y cada vez tengamos más reservas? Esta es la pregunta del profesor Lomborg. Su respuesta tiene en cuenta diversas variables, que olvidamos frecuentemente.
Así, nos recuerda que continuamente se exploran zonas nuevas y se encuentran nuevos yacimientos.
Si el precio sube, además, se harán rentables los yacimientos cuya extracción resulta más dificultosa, aumentando así las reservas y la producción.
Por lo tanto, afirma Lomborg "la subida del precio eleva nuestras reservas totales, con lo que el precio volverá a bajar".
Pero el dato más importante que aporta estriba en que los avances tecnológicos hacen que cada vez explotemos mejor los yacimientos.
"La primera perforación que se realiza en un yacimiento suele aprovechar tan solo un 20 por ciento del petróleo que contiene (…) se calcula que en los diez campos petrolíferos más grandes de Estados Unidos seguirán conteniendo el 63 por ciento de su petróleo original cuando finalice su explotación", afirma el profesor Lomborg, citando un estudio danés de Craig.
Los consumidores y fabricantes también podemos influir gastando menos energía. El Departamento de Energía de Estados Unidos estima que se puede ahorrar entre un 50 y un 94 por 100 de la energía consumida en los hogares.
Los fabricantes, por su parte, han realizado un verdadero esfuerzo en el ahorro de la energía consumida.
Así, nos recuerda que continuamente se exploran zonas nuevas y se encuentran nuevos yacimientos.
Si el precio sube, además, se harán rentables los yacimientos cuya extracción resulta más dificultosa, aumentando así las reservas y la producción.
Por lo tanto, afirma Lomborg "la subida del precio eleva nuestras reservas totales, con lo que el precio volverá a bajar".
Pero el dato más importante que aporta estriba en que los avances tecnológicos hacen que cada vez explotemos mejor los yacimientos.
"La primera perforación que se realiza en un yacimiento suele aprovechar tan solo un 20 por ciento del petróleo que contiene (…) se calcula que en los diez campos petrolíferos más grandes de Estados Unidos seguirán conteniendo el 63 por ciento de su petróleo original cuando finalice su explotación", afirma el profesor Lomborg, citando un estudio danés de Craig.
Los consumidores y fabricantes también podemos influir gastando menos energía. El Departamento de Energía de Estados Unidos estima que se puede ahorrar entre un 50 y un 94 por 100 de la energía consumida en los hogares.
Los fabricantes, por su parte, han realizado un verdadero esfuerzo en el ahorro de la energía consumida.
Se produce más con menos
El dato más importante y revelador nos lo aporta el Banco Mundial que nos muestra como en la actualidad se produce prácticamente el doble de riqueza que en la década de los 70, utilizando la misma cantidad de energía.
Otro dato que olvidamos es el desarrollo de las energías renovables, como la eólica y la solar.
El elevado pecio del petróleo las está convirtiendo en verdaderas alternativas a éste. Su precio, según el profesor Lomborg, ha descendido el 98 y el 94 por ciento respectivamente en los últimos 20 años.
La conclusión optimista nos la aporta la Agencia de Información Energética de Estados Unidos, cuando afirma que "la negativa imagen proyectada sobre los recursos potenciales que quedan en el planeta está basada en cálculos sobre las reservas comprobadas y su descenso teórico".
Cuando se contabilizan los yacimientos no descubiertos, las mejoras en eficacia y la explotación de recursos petrolíferos no convencionales, resulta difícil no ser optimista sobre las perspectivas a largo plazo para el petróleo como fuente de energía viable para el futuro.
No obstante, sí debemos ser conscientes, como ha recordado el presidente de Estados Unidos, George W. Bush. en su reciente discurso sobre el Estado de la Nación, que Occidente depende en una proporción demasiado elevada del suministro de petróleo proveniente de zonas muy inestables políticamente.
No debemos ser alarmistas, recordemos aquella preclara afirmación del jeque Jamani, fundador de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), "la Edad de Piedra no terminó por escasez de piedras, y la era del petróleo también terminará, pero no será por la escasez de petróleo".
El final de la época del petróleo terminará porque dispondremos de alternativas que lo hagan innecesario.
Otro dato que olvidamos es el desarrollo de las energías renovables, como la eólica y la solar.
El elevado pecio del petróleo las está convirtiendo en verdaderas alternativas a éste. Su precio, según el profesor Lomborg, ha descendido el 98 y el 94 por ciento respectivamente en los últimos 20 años.
La conclusión optimista nos la aporta la Agencia de Información Energética de Estados Unidos, cuando afirma que "la negativa imagen proyectada sobre los recursos potenciales que quedan en el planeta está basada en cálculos sobre las reservas comprobadas y su descenso teórico".
Cuando se contabilizan los yacimientos no descubiertos, las mejoras en eficacia y la explotación de recursos petrolíferos no convencionales, resulta difícil no ser optimista sobre las perspectivas a largo plazo para el petróleo como fuente de energía viable para el futuro.
No obstante, sí debemos ser conscientes, como ha recordado el presidente de Estados Unidos, George W. Bush. en su reciente discurso sobre el Estado de la Nación, que Occidente depende en una proporción demasiado elevada del suministro de petróleo proveniente de zonas muy inestables políticamente.
No debemos ser alarmistas, recordemos aquella preclara afirmación del jeque Jamani, fundador de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), "la Edad de Piedra no terminó por escasez de piedras, y la era del petróleo también terminará, pero no será por la escasez de petróleo".
El final de la época del petróleo terminará porque dispondremos de alternativas que lo hagan innecesario.
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